Buscar este blog

viernes, 23 de septiembre de 2016

COLOMBIA, PAZ Y ELIMINATORIAS

La mitad del recorrido ha sido superada. El desafío encara su segunda parte, con una determinante misión… Clasificar. Es la meta de cada cuatro años. Clasificatorias o eliminatorias, dependiendo cómo se vea el vaso, es el reto. Clasificar o ser eliminado, es el sinónimo del resultado. Para Colombia, será Clasificar.

Las eliminatorias sudamericanas son, contextualmente, las más competitivas del planeta, y el hecho que estén incluidos países como Venezuela y Bolivia, por ejemplo, no es excluyente. La geografía compleja, el calor extremo, la insoportable altura sobre el nivel del mar, entre otros aspectos, atavían la complicada y difícil clasificatoria.

La época del año en la que estamos presenta varias incógnitas. Para la selección colombiana, la última jornada tuvo dos definiciones no ambiguas pero tampoco complementarias. Podrán decir que ganarle a Venezuela y perder frente a Brasil estaba en los planes. Puede ser aceptable esa inferencia. Sin embargo, y en pleno siglo XXI, no debería existir lugar para conformismos. Así como se puede perder en cualquier escenario, cabe decir que se puede vencer en cualquier lugar del planeta.

Resultado de imagen para seleccion colombia 2016 vs venezuela

Dicho aquello, con 13 puntos sumados, ubicados en la cuarta posición y por consiguiente en zona de clasificación, no podrá ser victoria lo que se cante por ahora. El hecho de ocupar un lugar dentro de los clasificados parcialmente deberá ser motivante y no preocupante.

No ha sido un trámite fácil. Y el 2016 representa un hito, un punto de inflexión. Salir bien librado de este año dará un mejor panorama a futuro; no hacerlo empezaría a soterrar las esperanzas.

Colombia tiene un recorrido por delante que no presenta fáciles desafíos. 2017 será otra aventura, pero octubre y noviembre son claves para las aspiraciones de la selección colombiana si en dos años quiere jugar, por sexta vez, la copa del mundo, en Rusia.


Octubre, duro de obviar
El reto más cercano llega con las fechas 9 y 10, los días 6 y 11 de octubre. Paraguay, el primer escollo. Será en condición de visitante, en el siempre difícil pero recientemente exitoso Defensores Del Chaco, en Asunción. Exitoso digo, porque en las últimas 4 eliminatorias, Colombia ha vencido en su feudo a los paraguayos.

Los guaraníes pasan por un momento de transición. Se ha ido Ramón Díaz, y llegó Francisco Arce, para su segunda etapa en el mando técnico del equipo. Tienen jugadores muy talentosos, pero están lejos todavía del nivel esperado.

Por su parte, el otro obstáculo tiene color celeste. La selección líder de la tabla, Uruguay, visita Barranquilla, su tabú reciente. El calor, la humedad, y los rivales amarillos, no han sido la mejor combinación para los charrúas, quienes, a pesar de cualquier adversidad, no bajan los brazos. Es por eso, que el conjunto dirigido por Pekerman deberá salir a ganar desde el primer segundo, olvidando las especulaciones. Salir con actitud ofensiva desde el pitazo inicial brindará mayores opciones para Colombia.


Noviembre rojo y albiceleste
Si octubre será complicado, noviembre no se presenta más dócil de sortear. Primero, será el bicampeón de América, que nunca facilita las cosas en cuanto a enfrentar a nuestra selección se refiere. Los chilenos necesitan sumar puntos a como dé lugar. En una incómoda y peligrosa séptima ubicación, la roja está obligada a buscar resultados positivos fuera de Santiago. Tendrá, por lo tanto, que vencer las difíciles condiciones de Barranquilla en su visita al Metropolitano.

Chile tiene sus consternaciones. Argentina, por su lado, también guarda sus propias. Una realidad es latente en la albiceleste y todo su entorno. La AFA está pasando por una crisis nunca antes vista, y lo anterior se refleja en el comportamiento deportivo de su equipo. La controversial renuncia de Gerardo Martino, la elección de Edgardo Bauza como nuevo entrenador, la renuncia y regreso de Lionel Messi y sus lesiones, han llenado el cielo futbolístico argentino, y la pasada jornada fue de contrastes. La pregunta entonces es… ¿Qué Argentina veremos cuando sean anfitriones ante la selección dirigida por Pekerman?

Luego de revisar este escrito, veo que hice énfasis en los aspectos débiles de los próximos rivales colombianos. No obstante, las realidades cambian de tendencia y dirección a cada instante, y Colombia tendrá cuatro rivales absolutamente directos, que quieren lo mismo que nosotros… clasificar!


2017, el saldo pendiente
Luego de superar esta etapa, los partidos a jugarse en el 2017 son frente a Bolivia, Brasil y Paraguay en casa. De visita, Colombia deberá buscar los puntos en el Atahualpa de Quito, en Venezuela (Puerto Ordaz, Barinas, Mérida, o donde sea que se juegue), y en el Nacional de Lima. No es tarea fácil, pero un agosto positivo es inapelable.

Realidades y contrastes enfrentarán James y compañía. La selección colombiana de mayores deberá esquivar un par de intentos de tumbo de sus rivales para llegar al 2017 con las cuentas en verde. No es fácil, pero Colombia y sus jugadores deben tener claro el norte. La cita, el objetivo y la meta, no cambia: es Rusia 2018.