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martes, 22 de junio de 2010

Ocurrió un 22 de jun10

Aquella tarde del 22 de junio de 1986 el mundo futbolístico empezaría a construir una leyenda. Un día que no sería olvidado. Ese partido celebrado en el estadio Azteca del distrito federal mexicano ante 114.580 aficionados, no será como cualquier otro, especialmente por lo hecho por el 10 argentino. Ese día, el mejor jugador de la historia dio a conocer toda la magia. Aquel partido sirvió para definir la carrera un tipo llamado Diego Armando Maradona.

Ese día argentinos e ingleses se enfrentaban en los cuartos de final de la copa del mundo de México 86, en una tarde del 22 de junio de aquel año. Un partido que despertaba muchas opiniones y sentimientos patrios, especialmente por el lado del país suramericano, debido a lo ocurrido en aquella guerra de las Islas Malvinas, la cual había tenido lugar en el año de 1982 y que el ejercito argentino perdería. A priori, los argentinos se encontraban con un escenario de revancha, aunque en este caso en el plano deportivo. Y aunque hasta el día de hoy las Malvinas (o Falklands para los británicos) siguen siendo dominio británico, los argentinos ese día se dieron el gusto de vencer a los ingleses.

Luego de que terminara el primer tiempo con empate sin goles, el segundo periodo se presentaría como el momento para marcar la historia del fútbol. Quien sabe si Maradona tuvo una motivación especial ese día, ya sea por encontrarse en un mundial, o si surgió un sentimiento diferente al enfrentar a Inglaterra en tan polémico partido. Lo cierto es que ese día resultaría perfecto para el 10 argentino.

Comenzando el segundo tiempo, y exactamente en el minuto 51, Maradona buscaba pisar el área contraria, e intentó juntarse con Valdano en una pared larga, a la que se interpuso el defensa inglés Steve Hodge. Sin embargo, Maradona siguió la jugada y ante el rechazo de Hodge, la pelota es despejada hacia atrás tomando altura, dirigiéndose hacia las manos del arquero Peter Shilton. Ante aquella situación, tanto Maradona como Shilton fueron en búsqueda del balón pero fue el argentino con su puño izquierdo extendido quien sacara la mayor venta. Con la aparición de la mano de D10S, Argentina se pondría arriba en el marcador, pero aquel hecho daría paso a uno de los momentos más controversiales en la historia de los mundiales, que inclusive hasta el sol de hoy todavía lo sigue siendo.

No obstante, la zurda del Diego aparecería 4 minutos más tarde en otra de las jugadas más recordadas en la historia del fútbol. En el minuto 55, Maradona tomaría una pelota en la mitad del campo, pisando la redonda con gran calidad, para luego tomar carrera eludiendo a los dos primeros rivales ingleses, Peter Reid y Peter Beardsley. Seguiría su camino por la banda derecha con gran velocidad y talento, para luego encarar hacia adentro, quitándose la marca de Terry Butcher y Terry Fenwick, para posteriormente entrar al área grande de los 16.5 metros y eludir al guardameta británico Shilton, lo que le significaría anotar el segundo gol albiceleste en el partido. Un segundo tanto argentino que mostraría al mundo el gol más impresionante jamás anotado, por el mejor jugador del mundo en aquella época. Un gol, que significó la exhibición de talento, rapidez mental y física, más impresionantes en la historia del fútbol. Simplemente, el mejor gol de todos los tiempos.

Finalmente, el goleador de aquel mundial, Gary Lineker, anotaría el descuento al minuto 81, pero ese día sería recordado por otros acontecimientos, teniendo a la misma persona como responsable. Un partido que representó las represalias de un país dolido, reflejadas en el fútbol gracias a la magia y talento del astro argentino. Un partido que definiría la carrera futbolística del más grande jugador de todos los tiempos. Para muchos argentinos es Dios hecho fútbol. Una idea algo tonta pero algo entendible. Ya sea por lo bueno o por lo malo, el 22 de junio de 1986 será el día que la gente recordará como el momento de mayor grandeza del mejor. En menos de 5 minutos, Diego Armando Maradona escribió las páginas más recordadas del fútbol argentino en su historia, y en ese periodo de tiempo haría las dos cosas que lo posicionarían en el lugar más alto del fútbol mundial.