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viernes, 4 de junio de 2010

EL MILAGROSO MINUTO 87

¡La sexta estrella juniorista ha llegado! Luego del fallido intento hace un año contra Once Caldas, Atlético Junior de Barranquilla ha conseguido su campeonato número 6 en la división mayor del fútbol profesional de Colombia. Tras haber perdido el partido de ida, Junior logró remontar en casa, y con un marcador global de 3 a 2, los tiburones se consagraron por sexta vez en su historia. Con goles de Bacca y Cortés, Junior hizo respetar su casa, y en contra de un muy buen equipo como La Equidad, Los tiburones se consagraron jugando en casa frente a un metro abarrotado de hinchas rojiblancos, que alentaron y sufrieron hasta el pitazo final. Fue nuevamente en el minuto 42 del segundo tiempo, tal y como sucediera en el 2004, cuando el conjunto rojiblanco logró poner el pronóstico a su favor, y cuando llegó nuevamente la alegría para la hinchada rojiblanca.

Junior arrancó el partido buscando lo que debía y lo que quería…goles. Por fortuna, éstos llegaron rápido y Junior abrió el marcador con un gol de Carlos Bacca tras un error de fundamento técnico del arquero de La Equidad, Nelson Ramos. 1 a 0 Junior, y las cosas pintaban bien para el equipo rojiblanco. Luego, apareció la velocidad y agilidad de un Víctor Cortés. Un jugador que fue creciendo a medida que fue avanzando el torneo, y alcanzó su pico más alto en estas finales. Los dos goles en la semifinal contra el DIM, y el segundo gol en el encuentro de vuelta de la final, ubican al delantero caleño como una de las piezas fundamentales que permitieron que el equipo barranquillero se llevara su sexto título. Corría el minuto 18 del partido, y Víctor Cortés concretó el que probablemente sea el mejor gol del campeonato, dándole un valor extra el hecho de ser conseguido en la final. Ese gol, le daba el título de manera provisoría al equipo tiburón. Un zurdazo magistral. Una obra de arte.

Empezaba el segundo tiempo, y Junior hacía rato había perdido la posesión de la pelota, y La Equidad buscaba nuevamente empatar la serie. Rápidamente lo conseguiría a través de David Leonardo Castro, tras una gran jugada de Sherman Cárdenas por la punta izquierda, eludiendo formidablemente a Román Torres. Ante la necesidad, Junior se hizo nuevamente de la posesión de la pelota, y buscó el arco contrario. Corrían los minutos y la gente se empezaba a hacer la idea de la posibilidad de una definición por tiros desde el punto penal. Nadie quería que aquello sucediera. Y luego se jugaba el minuto 42 del segundo tiempo. Una jugada donde Carlos Bacca buscaba encarar en el área grande de los 16,5 metros, y al encontrarse con un rechazo de Jhon Viáfara, la pelota inocentemente le golpea para luego tomar una trayectoria que se le hizo imposible atajar al arquero asegurador. Un gol extraño, poco usual y menos ortodoxo que otros. Sin embargo, gol al fin, y fue nuevamente en el minuto 87 del partido, tal y como sucediera en aquella tarde del 19 de diciembre de 2004 en el estadio Atanasio Girardot, cuando Walter Ribonetto anotó el segundo gol en aquella final contra Atlético Nacional. Tremenda coincidencia. Minuto milagroso. Para Junior, se convirtió en el minuto sagrado. Ambos goles no se catalogan como goles de gran vistosidad, pero han representado los últimos dos títulos para Junior, y ambos fueron en el mismo minuto de juego. No podría haber sido de otra forma sino de esta, para que la emoción fuera mayor. Las grandes emociones en el fútbol se viven cuando los goles llegan en los últimos minutos del partido, y Junior hizo caso al llamado…y dos veces.

Como buen padre, Junior puso a su favor los pronósticos contra el equipo “chico”, y ganó en su casa, con botín de oro incluido, y frente a casi 60.000 personas que llenaron el Metropolitano. Junior campeón por sexta vez, se clasifica directamente a la fase de grupos para la edición 2011 de la copa Libertadores de América, y así, evita tener que ir a la angustiosa fase de repechajes.

Por otro lado, cabe destacar la labor de un equipo como La Equidad. Un EQUIPO humilde, trabajador, luchador y admirable. No obstante, los castigó el hecho de que su juego se basa en pegar y pegar de manera constante. No por nada fue el equipo más amonestado y penalizado del torneo. Es una manera de jugar, y eso los llevó a la final, pero deberían dedicarse más a jugar y no a pegar. Demostraron que cuando juegan mejor al fútbol, hacen mucho daño...cuando se lo proponen. Si lo logran, definitivamente darán el siguiente paso para convertirse en campeones, ya que tienen buenos jugadores, y son un equipo muy organizado, tanto deportiva como administrativamente.

1977, 1980, 1993, 1995, 2004-II y 2010-I, son los años de consagración. Diego Umaña, se convirtió en el segundo técnico colombiano que saca campeón al equipo de Barranquilla, uniéndose su nombre junto al de Carlos “piscis” Restrepo, quien sacó campeón al equipo en el año de 1995.

Otra vez más el minuto 87 hizo de las suyas. Minuto sagrado. Minuto inolvidable. Momentos mágicos. Felicitaciones al Atlético Junior y a toda Barranquilla. Sexto título. Sexta estrella. JUNIOR…TU PAPÁ!!!